Corre el año 1991, Charlie (Logan Lerman), es un adolescente solitario, tímido, introvertido, excepcional académicamente y poco sociable: es un marginado en su escuela. Su vida trascurre en soledad y con continuos abusos hasta que un par de jóvenes carismáticos le dejan entrar en su círculo. Sam (Emma Watson) y su hermanastro Patrick (Ezra Miller), dos alumnos de último curso, introducirán a Charlie en un mundo desconocido hasta ahora para él: nuevas amistades, el primer amor, sexo, fiestas, pases a medianoche de The Rocky Horror Picture Show...
Al mismo tiempo, su profesor de inglés, el Sr. Anderson (Paul Rudd), le introduce en el mundo de la literatura, fomentando su sueño de ser escritor. Cuando Charlie parece que ha encontrado su camino y comienza a encontrar la felicidad una torpeza hará que se distancie de sus amigos. Este hecho junto a la marcha de Sam y Patrick a la Universidad provocará que las sombras de su pasado (el suicidio de su mejor amigo Michael y la muerte accidental de su amada tía cuando era un crío), comiencen a minar el frágil equilibrio emocional de Charlie hasta que aflore un hecho oscuro de su pasado.
Las ventajas de ser un marginado es una película que trata sobre adolescentes pero se sale del camino marcado por los estereotipos del cine adolescente americano. Es una película adulta que nos muestra con gran solvencia lo que ocurre en la mente y el corazón de las personas en esta etapa tan complicada. Stephen Chbosky, autor de la novela original publicada en 1999, se encargó de adaptar el guión y dirigir la cinta, con lo cual la coherencia de la obra creo que está asegurada.
Hay que destacar la interpretación de los tres protagonistas principales: Emma Watson está sobresaliente y despeja así las dudas que podrían surgir tras el fin de la saga de Harry Potter, Ezra Miller nos muestra excepcionalmente con su interpretación la complejidad de su personaje y Logan Lerman transmite con absoluta solvencia la timidez y la angustia que le provoca su pasado.
También es destacable la ambientación de la época y la selección musical, en la que destaca el tema "Héroes" de David Bowie tan importante en dos de las mejores escenas de la película: lo siento pero si queréis saber cuáles son tendréis que ir al cine.
En definitiva, una película muy recomendable, que no os dejará indiferente y que, por Dios, NO OS DEBÉIS PERDER.
Nota: 9/10
A tener en cuenta: el telón de fondo de los 90 resulta muy evocador... aquellos años en los que costaba encontrar una canción que se escuchaba por casualidad en la radio.
Lo mejor: la escena del primer beso, el tema de David Bowie como clave en dos escenas y la pelea en el instituto con un fundido en negro.
Lo peor: que desgraciadamente pasará desapercibida cuando es mucho mejor que alguna de las nominadas para los Oscar.
-Juan Martos-
No podría estar más deacuerdo con usted señor Martos, buen trabajo¡¡¡ jejeje
ResponderEliminarGENIAL
ResponderEliminarBUENÍSIMO ME HA GUSTADO UN MONTON
ResponderEliminarUna película maravillosa, con actuaciones magníficas, sobre todo de Emma Watson. Un muy buen sabor de boca.
ResponderEliminar